Camas nido, muebles ideales para habitaciones infantiles y juveniles

Decorar la habitación de los más pequeños de la casa no suele ser una tarea sencilla, si bien es cierto que puede resultar muy emocionante, sobre todo porque en ese tipo de estancias podemos dejar volar nuestra imaginación, algo que no podemos hacer tanto como nos gustaría en otros espacios del hogar. Eso sí, es esencial que tengas en cuenta la opinión de los niños. De hecho, lo ideal es que niños y adultos compartan la tarea de decorar el cuarto juntos. Por supuesto, las decisiones más importantes, como la elección de la cama, deberás tomarlas tú.

En el mercado podrás encontrar diferentes tipos de camas infantiles, así que puede que te cueste decidirte por un diseño en concreto. Probablemente te hayas planteado introducir una cama nido en la habitación de tu pequeño, ya que suelen ser las más numerosas en las tiendas de muebles, además de resultar diseños tremendamente prácticos. Hoy queremos hablarte sobre este tipo de camas, explicándote en qué consisten, todas sus ventajas e inconvenientes y los diferentes tipos que se pueden encontrar en el mercado. ¿Nos acompañas?

Qué es una cama nido

Las camas nido son conjuntos de dos camas en los que una de ellas se recoge bajo la otra formando un único mueble. Lo normal es que la cama supletoria tenga las mismas dimensiones que la principal y suele contar con un somier y unas ruedas para que pueda extraerse de forma fácil. Eso sí, debes saber que también pueden llamarse camas nido a aquellos modelos que en lugar de tener otra abajo, ofrecen cajones, como el que puedes ver en el siguiente dormitorio juvenil.

Ventajas e inconvenientes

Las camas nido nos proporcionan muchos beneficios. La principal ventaja es que cuando la cama que se encuentra debajo no se utiliza, queda recogida, por lo que permite ganar espacio habitable en la habitación infantil y juvenil. Sin duda, resulta una opción magnífica para aquellas estancias en las que los metros cuadrados brillan por su ausencia, que son la mayoría hoy en día. Por otro lado, debemos destacar que las camas nido pueden tener una vida útil muy larga, ya que la longitud suele ser estándar, así que pueden ser igual de prácticas tanto para niños como para adolescentes. Por tanto, no es mala idea hacerse con un modelo de este tipo desde que el pequeño abandona la cuna. También queremos comentar que las camas nido son muy versátiles, ya que también pueden encajar a la perfección en una habitación de invitados. Además, podrás encontrar diseños de calidad a precios muy asequibles.

Aunque las ventajas de las camas nido son numerosas, antes de escoger un diseño de este tipo deberás tener en cuenta sus inconvenientes. El principal es que, si se trata de una habitación para dos hermanos, puede ser un incordio tener que sacar y guardar la cama cada día, si bien es cierto que los diseños son cada vez más prácticos. Por otro lado, hay que tener en cuenta que suele tratarse de camas altas, lo que puede resultar incómodo para el pequeño. Además, guardar la cama en invierno puede resultar más complicado por la ropa de cama.

Tipos de camas nido

Si tienes pensado comprar una cama nido debes saber que en el mercado las encontrarás de diferentes clases. Las más habituales son las de arrastre, aunque también podrás encontrar en el mercado camas nido sofá. Como te hemos comentado antes, también existen las camas que, en lugar de otra, guardan cajones debajo. Incluso, las hay que combinan ambos elementos: cama y espacio de almacenaje, como el diseño que puedes ver en la siguiente habitación juvenil.

Sin duda, las camas nido que incluyen cajones se encuentran entre las más prácticas, sobre todo teniendo en cuenta que uno de los problemas de las viviendas de hoy en día es la falta de espacio para almacenar.