Los mejores colores para habitaciones pequeñas

Los colores para decorar habitaciones pequeñas pueden convertirse en nuestros mejores aliados para ampliar visualmente el espacio. Por suerte, existen algunos trucos decorativos que nos pueden ayudar a darle a nuestro hogar una mayor sensación de amplitud. Os los contamos en el blog de decoración de Muebles BOOM. ¡No te lo pierdas!

Desafortunadamente, no todos podemos vivir en grandes mansiones con espacio suficiente para decorar a nuestro gusto y sin preocupaciones. De hecho, la mayoría tenemos que conformarnos con pequeños pisos en los que el espacio suele brillar por su ausencia. Por ello, debemos tener en cuenta que escogiendo determinados colores, patrones o combinaciones de colores, no solo podremos conseguir que las habitaciones más pequeñas parezcan más grandes, si no que lograremos transmitir ciertas emociones y sensaciones. Vayamos por partes:

1. Los techos:

En primer lugar queremos centrarnos en el color del techo, que deberá ser preferiblemente más claro o menos llamativo que el de las paredes. En el caso de que escojas colores atrevidos para esta zona de la estancia, podrás conseguir un efecto que hará parecer que la habitación es más baja de lo que realmente es, lo que provocará que la habitación parezca más pequeña. En definitiva, es mejor decantarse por los techos en color blanco.

2. Las paredes:

En cuanto a las paredes, debes tener en cuenta que los colores oscuros harán que una habitación parezca más pequeña, mientras que los tonos claritos como los blancos, los crudos o los colores pastel son ideales para potenciar la luz en el espacio, lo que creará un efecto visual de amplitud. Sin embargo, tampoco debes evitar los colores oscuros por completo, ya que suelen camuflar bordes y sombras, lo que hará aumentar la percepción de profundidad. Así, puedes usarlos con moderación combinándolos con colores claros y medianos.

Otra opción es pintar pequeños patrones en un fondo sólido en lugar de dejar las paredes completamente lisas. Esto podría crear la ilusión de que la habitación tiene una mayor profundidad y aumentar la percepción del tamaño. También puedes optar por las líneas horizontales, que harán que la habitación parezca más amplia de lo que es, aunque hay que tener cuidado, ya que también produce el efecto de que el techo es más bajo. En cambio, con las líneas verticales las estancias parecen más altas.

3.Los muebles:

En cuanto a los muebles, es buena idea escogerlos en el mismo color que las paredes o de tonos claros para ayudar a ampliar el espacio. Además, parecerá que ocupen menos. No olvides que los colores neutros en los muebles no fallan, así que si no te atreves a arriesgarte e innovar, elige colores blancos, beiges,  negros, grises,… y, por supuesto, cualquier tipo de madera siempre aporta calidez y va con todo.
Pero si cuentas con un espacio reducido en el que entra mucha luz, es preferible escoger colores fríos como el verde, el azul y grises para combatir la sensación de ahogo. Además, los colores fríos provocan la sensación de serenidad, recogimiento, pasividad y sensación de frío. Este dormitorio en tonos grises conseguirá que la estancia parezca más grande, siempre y cuando te decantes por paredes y techos en colores claros.

Por supuesto, no deberás recargar la habitación con muebles ni accesorios. Cuantos menos obstáculos haya para la vista, menor será la sensación de pequeñez. Además, no te olvides de decorar con espejos. El reflejo de la estancia y de la luz hará que el lugar parezca mayor. Cuanto más amplios sean los espejos, mejor.