Los fans del estilo nórdico lo tienen muy claro. Quieren que su casa se beneficie de todas las bondades de un tipo de decoración que empezó triunfando en países como Suecia, Noruega o Dinamarca, y que no tardó mucho en llegar al resto de Europa para quedarse. De hecho, no solo la adoran en el viejo continente, sino que también es bastante habitual verla en otros lugares del mundo como Norteamérica.
Si quieres que el despacho de tu casa también luzca una decoración scandi, te recomiendo tomar nota de lo que te contamos a continuación, ya que compartimos una serie de consejos muy útiles para lograr que dicho estilo vaya más allá del salón o el comedor.
Mobiliario
Los muebles son parte fundamental del estilo nórdico. Deben ser de tonos claros que vayan a juego con el blanco, que como comentaremos más adelante es el color que debe predominar. En ese sentido, a tu despacho le harán falta estantes, archivadores con cajones, una silla y una mesa o escritorio con una anchura lo suficientemente generosa como para que no te falte de nada a la hora de trabajar. Tenerlo todo organizado es fundamental, como también lo es mantener la limpieza.
Distribución
Piensa en una distribución que te permita trabajar con comodidad. Para ello, es importante no sobrecargar el despacho con muebles y accesorios que ocupen demasiado espacio. Respeta las distancias de seguridad que siempre debe haber entre muebles y ten en cuenta que las zonas de paso tienen que estar despejadas.
Colores
Como hemos comentado anteriormente, no hay un color que le siente mejor a la decoración nórdica que el blanco. Eso también sucede en el despacho, donde por suerte suele ser una tonalidad bienvenida por el simple hecho de facilitar la concentración. Lo mismo podemos decir de otros tonos neutros como el gris, que pueden quitarle todo ese protagonismo al blanco. Además, no hay que olvidar que también es una buena idea añadir unas pinceladas de color para que el despacho no sea tan aburrido. En ese sentido te recomendamos el azul, que es una tonalidad que va muy bien para relajarse y concentrarse en una tarea.
Iluminación
En cualquier despacho la iluminación es fundamental, y eso no cambia cuando se trata de decorarlo al estilo nórdico. Lo mejor de todo es que podemos encontrar muchos diseños de lámparas de techo y de sobremesa en el mercado, así que no es nada complicado dar con un modelo convincente para iluminar la zona de trabajo. A pesar de que en el estilo nórdico lo que prima es la luz natural, es probable que te veas en la obligación de recurrir a la iluminación artificial durante buena parte del día. En ese caso, haz todo lo posible por distribuir los puntos de luz por la habitación.
Plantas
¿Qué sería de nuestras vidas sin las plantas? ¡Dan vida a cualquier estancia del hogar! El despacho no es una excepción, y a todo adepto de la decoración nórdica no le importa reservar unos cuantos huecos para colocarlas. Lo mismo podemos decir de las flores, que puestas en un jarrón rejuvenecen todo tipo de espacios.
Elige bien la planta teniendo en cuenta si es de interior y si necesita mucho riego. Elige bien el diseño de los maceteros, para que se integren a la perfección, y búscales el lugar idóneo. Puede ser encima de la mesa, pero también en un estante o en una estantería. De hecho, incluso las puedes poner en el suelo. Hoy en día es tendencia colocarlas dentro de una cesta vietnamita, para lo que es importante que tengan un tamaño considerable. Con ello se oculta la maceta, en cuyo caso no debería importante tanto su diseño.