¡El verano está al caer! Muy pronto podremos decir que ha llegado la época preferida de millones de españoles, algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta que es cuando disfrutamos de nuestras vacaciones y tenemos más tiempo libre para disfrutar de unos días que se alargan como nunca.
Si quieres que en tu casa también se note que es verano, empieza por prestar atención a la decoración de tu dormitorio. Basta con poner en marcha una serie de consejos muy sencillos para que se note que estamos en la época del año más calurosa y divertida.
Despídete de las alfombras
Tan importante es añadir productos decorativos como quitarlos. Las alfombras son perfectas para el otoño y el invierno, pero en primavera y en verano es mejor prescindir de ellas (sobre todo en verano). Eso sí, dependiendo del tejido de las alfombras no es tan decisivo, ya que las de fibras naturales pueden quedarse hasta en verano.
Estrena ropa de cama
El verano es el mejor momento para estrenar ropa de cama. Lo ideal es decantarse por tejidos vaporosos y por diseños alegres, con estampados de flores, animales y otros motivos que nos recuerden a lo que suele caracterizar esta época del año tan especial. Las fundas nórdicas, las mantas y los edredones dejan pasa a las colchas más frescas.
¿Qué tal si añades más plantas?
La decoración de tu dormitorio gana siempre que hay plantas. Plantas y flores, porque nunca está de más tener un ramo de flores frescas sobre una cómoda o sobre las mesitas de noche. Lo agradecerás por la alegría que transmiten a nivel visual, pero también por lo bien que huelen. Además, en el caso de las plantas ya sabes que son capaces de transformar el dióxido de carbono en oxígeno, así que podríamos decir que purifican el aire en cierto modo.
Colores claros, vivos y alegres, por favor
El verano no es tiempo de lamentos. El verano es tiempo de diversión, de pasarlo bien junto a esas personas que tanto quieres. Eso es algo que se debe notar en tu actitud, y para contagiarte de optimismo no hay nada como apostar por colores claros y llenos de vitalidad. Eso no significa que el blanco sea el único protagonista, aunque de hecho es el que más posibilidades te va a brindar. Eso significa que puedes atreverte con una paleta de colores vibrante sin miedo a que desentonen. Dichos colores pueden manifestarse en las paredes y en el techo, pero también en todo tipo de complementos decorativos, siendo los textiles los que más juego van a dar a tu dormitorio por motivos evidentes.
La combinación blanco y azul
Si hay una combinación que triunfa en verano, esa no es otra que la que combina el blanco y el azul. Puede que no seas muy fan de la decoración marinera, pero es que queda tan bien y transmite tan buenas vibraciones… ¿O acaso no te gustaría estar en casa como si estuvieras en una terraza enfrente de la playa? ¡A todos nos gustaría! Mezcla el blanco y el azul siendo prudente, apostando por la madera para los muebles y el parqué. Además, no olvides añadir accesorios marineros para completar el conjunto, tales como peces, tortugas, estrellas de mar, barcos, timones, etc.
Relax de la mano de los colores tierra y arena
El relax no solo se puede obtener con la combinación de blanco y azul que nos traslada al Mediterráneo, sino que también podemos optar por una combinación bien distinta en la que predominen tonos tierra y arena. Son colores serenos y naturales, así que te sentirás en plena conexión con la naturaleza.