
¿Tienes el salón siempre desordenado? Puede que en realidad esté ordenado y que la culpa sea de esos pequeños detalles en los que nunca reparamos. Si te paras a pensar, a veces son las pequeñas cosas las que pueden arruinar el orden, y de hecho después de leer este artículo vas a tener mucho más claro que todo tiene solución, sobre todo cuando se trata de ordenar una estancia como el salón, en la que pasamos muchas horas y tendemos a dejar cosas donde no toca. ¿Te suena? Seguro que sí.
Mandos por todas partes
Hoy en día tenemos mandos para casi todo. Para la televisión, para el equipo de audio de la televisión, para el aire acondicionado, etc. Eso hace que corramos el riesgo de que los mandos estén siempre desperdigados por el salón, aunque por suerte eso tiene fácil solución. ¿Cuál? Tener un lugar en el que poder colocar todos los mandos, ya sea pegados al sofá, en un cajón de la mesa o en otra parte en la que no estén siempre a la vista. Los mandos, por muy modernos que sean, nunca pueden ser considerados como un elemento decorativo más, así que mejor mantenerlos fuera de nuestro alcance.
Libros mal colocados
Si tienes una librería en el salón, deberías hacer todo lo posible para mantener el orden en ella. Algo que suele pasar y que queda francamente mal es que los libros no estén bien colocados. Empiezas a ponerlos en doble fila y con el paso de los días te das cuenta de que ese orden tan impecable, en el que incluso te habías atrevido a clasificarlos por colores, se va perdiendo poco a poco hasta que al final pierdes la ilusión por convertir esa librería en un elemento decorativo más. Organiza los libros como quieras, no hace falta que sea por colores. Pero organízalos.
Mesa de centro llena de cosas
Sabes que nos encanta el orden y la decoración minimalista ayuda mucho en ese sentido. Sin embargo, nos lo podemos cargar todo si empezamos a acumular cosas en un lugar como puede ser la mesa de centro, que es de esos elementos que tendemos a sobrecargar en el día a día. Luego llega el fin de semana y con la limpieza todo vuelve a su sitio, pero durante la semana hay que hacer todo lo posible por mantener esa mesa despejada para que no reine el caos.
Exceso de textiles
Otro error que podemos cometer es el de abusar de los textiles en el salón. Es verdad que hay cojines y mantas que son sencillamente irresistibles, pero no menos cierto es que podemos convertirnos en unos locos de los gatos en versión cojines y mantas. Para que eso no pase, lo mejor que puedes hacer es poner un límite de textiles. Eso y comprar fundas de cojín, porque si eres de los que no paran de comprar cojines al final no sabrás qué hacer con los rellenos y te verás obligado a tirarlos a la basura por una cuestión de espacio.