¿Estás pensando en comprar un armario? Pues independientemente del lugar donde vayas a colocarlo, lo primero que deberás plantearte es qué tipo de puertas quieres que tenga. Aunque en el mercado encontrarás diferentes opciones, lo cierto es que el dilema siempre suele estar entre escoger armarios de puertas correderas o armarios de puertas batientes. En la actualidad, existen armarios de ambas opciones, respondiendo a las necesidades de los clientes que buscan soluciones sencillas y elegantes para aprovechar al máximo los espacios de las viviendas. Por eso, hoy que hoy vamos a echarte una mano para que te decidas.
Diferencias entre puertas batientes y correderas
Antes de entrar en materia queremos explicarte en qué consiste cada tipo de puerta. Por un lado encontramos la puerta batiente, un tipo de puerta practicable con bisagras, que suele ser la opción más práctica y económica. Además, suelen ser puertas muy duraderas y con mantenimiento y reparación muy sencillos. En la fotografía del principio puedes ver un ejemplo de armario con puertas batientes. En este caso, se trata de una pieza de gran capacidad de 301 cm de ancho, fabricado en tablero melaminizado 16 mm, 6 puertas batientes, 2 separaciones centrales, 3 estantes fijos en la parte superior, 3 barras de colgar y 3 estantes fijos en parte inferior.
Por otro lado encontramos las puertas correderas, que suponen la opción más moderna y, en muchas ocasiones, la mejor solución para problemas de espacio, aunque no siempre es la opción más práctica.
Teniendo en cuenta la estética
Sin nos centramos en el aspecto más estético, lo cierto es que hoy en día mucha gente prefiere las puertas correderas por ser mucho más llamativas, aunque también es verdad que hoy en día se está cuidado más la presentación del armario de puertas normales. Por otro lado, hay que tener en cuenta que el armario con puerta corredera permite poner puertas mucho más anchas y cerrar un armario de hasta 3 metros de ancho con solo dos puertas, dando una estética mucho más minimalista, un estilo que se ha convertido en la tendencia del momento. Además, puede resultar mucho más práctico, ya que abriendo una sola puerta se puede contemplar prácticamente la mitad del armario, como ocurre con este armario de gran capacidad de 241 cm de ancho, fabricado en tablero melaminizado 16 mm, 2 puertas correderas, 3 separaciones centrales, 3 estantes fijos en la parte superior, 3 barras de colgar y 2 estantes fijos en la parte inferior, parte derecha con hueco con 5 estantes y parte izquierda con hueco para colgar prendas largas.
Teniendo en cuenta el espacio
Pero más allá de los aspectos estéticos, el kit de la cuestión se encuentra en el espacio disponible en el hogar. Y es que los armarios con puertas correderas permiten contar con más espacio en las estancias que los albergan, debido a que no es preciso dejar un espacio para permitir la apertura de los mismos. Sin embargo, si el fondo no es amplio, esta forma de apertura no suele ser una buena solución para los roperos en los que se vayan a guardar camisas y otras prendas colgadas en perchas.
Teniendo en cuenta la higiene
Una de las principales ventajas de los armarios de puerta de bisagra es que se cierran de manera más hermética, lo que permite que entre menos polvo en su interior, a pesar de que se necesiten una mayor cantidad de puertas para cerrar la misma medida que respecto a las puertas correderas, como te hemos comentado antes.
Teniendo en cuenta el precio
Si después de considerar todos los factores no has resuelto el dilema, puede que el precio te ayude a decidirte. Y es que normalmente, aunque la calidad de acabados y materiales sea el mismo, los armarios de puertas batientes son más económicos que los de puertas correderas.