La habitación infantil es, sin duda, la estancia más cambiante del hogar. Durante los primeros meses de vida del pequeño suele ser un espacio sencillo y relajante; después se convierte en un auténtico caos por culpa de los juguetes; y cuando se acerca el periodo de la adolescencia se transforma en una especie de refugio en el que los jóvenes se concentran y escapan de los problemas típicos de su edad: amistades, primeros amores, estudios… Estos cambios son inevitables, así que es mejor que tengas en cuenta las cinco claves para que las habitaciones infantiles se adapten al crecimiento de tus hijos. ¡Te aseguramos que son consejos muy útiles!
Mobiliario convertible
Los niños crecen a pasos agigantados y sus necesidades también van cambiando con el paso del tiempo. Por eso, durante mucho tiempo lo normal era cambiar el mobiliario cada cierto tiempo para adaptarse a los pequeños de la casa. Sin embargo, en los últimos años se han popularizado los muebles convertibles, que son aquellos que crecen con el niño y, por tanto, posibilitan que no haya que hacer grandes cambios en la habitación. Puede que cuesten algo más que los muebles tradicionales, pero a la larga salen mucho más baratos. Puedes ver un ejemplo en la imagen que te mostramos a continuación. En ella puedes ver una habitación infantil con cuna convertible que está disponible en más tonalidades.
Un espacio saludable
Otro consejo que queremos ofrecerte es que te decantes por una decoración saludable. ¿Qué queremos decir con esto? Pues, principalmente, que apuestes por pinturas ecológicas y tejidos naturales. Además, siempre es buena idea potenciar al máximo la luz natural y procurar que haya una buena ventilación. A medida que pasen los años lo irás agradeciendo.
Diferenciar las zonas
Otra clave para que la habitación de tu hijo vaya adaptándose a su crecimiento es crear zonas diferenciadas desde el principio. Así, lo ideal es que en la habitación haya una zona para dormir, otra para jugar o de ocio, y otra para estudiar y hacer los deberes. En estancias pequeñas esto resultará más complicado, pero deberás procurar, al menos, que la zona de estudio y la cama estén bastante separadas para que el niño o el adolescente pueda irse a dormir sin tener a la vista las cosas del colegio, ya que esto podría influir en su descanso.
La importancia de los colores
Aunque en las habitaciones infantiles siempre es buena idea añadir toques de color a través de los accesorios y los objetos decorativos, es buena idea apostar por mobiliario en colores neutros como los que aparecen en la habitación de la siguiente imagen. Y es que es importante tener en cuenta que los gustos de los más pequeños de la casa son muy cambiantes. Así, es posible que un día tengan un color preferido y al día siguiente lo odien.
Espacio de almacenamiento suficiente
Cuando los niños son pequeños apenas necesitan espacio de almacenamiento más allá de baúles y cajas para guardar sus juguetes. Sin embargo, a medida que van creciendo, los niños van acumulando más pertenencias, por lo que es importante proporcionarles los sistemas de almacenaje necesarios para que puedan guardar sus cosas y, por supuesto, mantenerlas en orden. Eso sí, es importante que desde bien pequeños les enseñes a ordenar su habitación y a guardar cada cosa en su sitio. Por otro lado, te recomendamos que el espacio para almacenar esté a su altura. Las cosas que menos utilizan pueden ir guardadas en los rincones más altos o más inaccesibles. Por ejemplo, puede ser buena idea guardar la ropa de otras temporadas en los estantes más altos de los armarios.