A todos nos gustaría vivir en una casa de grandes dimensiones en la que no tuviéramos problemas para colocar determinadas piezas de mobiliario o almacenar nuestras pertenencias. Sin embargo, en estos tiempos a la mayoría no nos queda más remedio que vivir en hogares donde los metros cuadrados brillan por su ausencia, ya que son los más habituales hoy en día, especialmente en las grandes ciudades. Pero ya que no nos queda otra que conformarnos con lo que tenemos, al menos debemos ver la parte positiva de las viviendas pequeñas. Y es que, aunque no lo creas, las casas casas pequeñas también tienen sus ventajas. ¡Te hablamos de las principales a continuación!
Las casas pequeñas son más baratas
Sin duda, una de las principales ventajas de las casas pequeñas es que son más baratas, ya se trate de una vivienda de alquiler o de compra. Por supuesto, también es más económico mantenerlas, ya que se necesita menos luz artificial, menos calefacción, menos aire acondicionado… Además, es importante que tengas en cuenta que los impuestos de los pisos y las casas pequeñas son menores a los de las casas grandes.
Las casas pequeñas son más fáciles de limpiar
Hoy en día, la mayoría de las personas llevamos una vida demasiado ajetreada (el trabajo, los niños, el gimnasio, las clases de inglés…), así que apenas nos queda tiempo para dedicárselo a la limpieza y la organización del hogar. Y es que, lógicamente, nuestros ratos libres queremos dedicarlos a aquellas cosas que verdaderamente nos gustan: estar con la pareja y los amigos, leer, ver la tele… Sin embargo, las casas pequeñas son súper fáciles de limpiar y de mantener en orden, así que no tendrás que dedicarle demasiado tiempo, sobre todo si te haces con piezas de mobiliario que te ayuden, como las camas con canapé abatible como la que puedes ver en la siguiente imagen.
Las casas pequeñas requieren una menor inversión
Además de ahorrar dinero en la compra o el alquiler y en las facturas, si tienes una casa pequeña también gastarás menos dinero en decoración, ya que no tendrás que hacerte con muchos elementos para llenar los espacios y que estos no queden vacíos y desangelados. Lo mejor, eso sí, es que te hagas con piezas multifuncionales, ya que ocupando el espacio de un solo mueble harán diferentes funciones. Además, con el precio de un mueble tendrás dos o más. Por ejemplo, puede ser una genial idea optar por una consola convertible en mesa de comedor como la que puedes ver en la siguiente imagen, que podrás utilizar como mueble recibidor cuando no la uses para comer.
Las casas pequeñas son más acogedoras
Las casas grandes tienen muchas ventajas pero también tienen un gran inconveniente: suelen ser muy poco acogedoras. En cambio, en las viviendas con pocos metros cuadrados podemos lograr ambientes cálidos y muy acogedores, eso sí, siempre y cuando acertemos con la decoración. Así, es imprescindible que no llenes las estancias de demasiados muebles y complementos. Por otra parte, las casas pequeñas hacen que la vida familiar sea más activa, ya que a los miembros no les queda más remedio que estar más unidos. Así, la comunicación es más fluida.
En las casas pequeñas no se acumulan cosas innecesarias
Por último, es importante que tengas en cuenta que en las casas pequeñas tendrás menos espacio para guardar, lo que también puede suponer una enorme ventaja, ya que no te quedará más remedio que deshacerte de aquellas cosas innecesarias que guardas durante años “por si acaso”. Además, como tienes menos espacio comprarás menos cosas, lo que supondrá que ahorres más dinero.