Ventajas de decorar en blanco

Muchas son las ventajas del blanco a la hora de decorar el hogar, por eso, en los últimos años se ha convertido en uno de los colores más solicitados en interiorismo. Y es que además de tener tantos matices que con ellos solos se puede decorar un único ambiente, amplía los espacios, aporta paz y tranquilidad, multiplica la luminosidad y combina con todo tipo de tonalidades. Lo mejor de todo es que este color siempre es tendencia

Amplia espacios

Como te acabamos de comentar, el blanco es perfecto para ampliar los espacios, por lo que es ideal para las viviendas de tamaño reducido, tan habituales en las ciudades hoy en día. En realidad, lo que sucede es que el blanco aporta luminosidad a los espacios por sí mismo, realzando la luz, ya sea natural o artificial, obteniendo una percepción del espacio mucho más amplia. De la misma manera, es ideal para estancias con escasa iluminación.

Versatilidad

Por otro lado, el blanco es un color muy versátil gracias a sus muchos matices y a que se puede combinar con todo tipo de colores y estilos decorativos. Eso sí, las diferentes tonalidades de blanco combinan especialmente bien con superficies naturales y armonizan a la perfección con colores neutros como el gris, el negro o los crema. Además, es ideal para disminuir la intensidad de los colores puros. Hay que tener en cuenta que para hacer protagonista al color blanco es importante introducir otros colores solo como pinceladas.

El color de la limpieza

El blanco también es ideal para dar sensación de limpieza. Si no, ¿por qué te crees que es tan utilizado en cocinas, baños y hospitales?

Minimalista y elegante

Por supuesto, el blanco es el color minimalista y elegante donde los haya, ideal tanto para espacios modernos como para rincones clásicos, donde se pueden crear ambientes de lo más acogedores. Además, el blanco es ideal para oficinas, ya que, como te hemos dicho, transmite paz y tranquilidad, además de ampliar e iluminar el espacio.

Fácil de usar

En gran parte gracias a su versatilidad, el blanco es un color muy fácil de usar. Eso sí, lo mejor es utilizarlo en grandes volúmenes (paredes, techos y suelos) y en el mobiliario y olvidarse de pintar la habitación más utilizada en este color, ya que es muy difícil de mantener. Por otro lado, una de las grandes ventajas del blanco es que, al jugar con muebles y paredes en este color, es mucho más sencillo sacar partido a detalles que queremos que llamen la atención en la estancia, como una alfombra de un color atrevido, una lámpara de diseño o cojines y cortinas alegres.

Ideal como fondo para el arte

También queremos destacar que el blanco es el color ideal para colocar sobre él obras de arte, ya que les da la luz necesaria para que destaquen, algo imprescindible para poder apreciar las obras con claridad.